lunes, 15 de diciembre de 2008

show must go on!!



Como en aquella horrible canción.

33 son los años que cumpliré en el 2010 y 33 son los minutos que ayer corrí tras 3 semanas de parón; 30’ otorgados por prescripción facultativa y los otros 3 regalo de la casa.

Tras abrir el ojo ayer a las 12 y pico de la mañana, decido que es el momento de salir a escena y realizar una correcta interpretación teniendo en cuenta las molestias de las pasadas semanas. Tras desayunar un tibio cola cao con galletitas, me enfundo mi traje deportivo dominguero para ir entrando en el personaje al más puro método de Lee Strasberg. De riguroso negro y con mi chaqueta chandalera de yonqui de Pan Bendito, salgo a comprar el periódico, echar gasolina y visitar el Carrefour. Cuando quiero darme cuenta, son casi las 3 de la tarde, así que mi programado estreno deportivo parece abocado al retraso. Siempre nos quedará la depresiva tarde del domingo.

Pánico escénico, miedo al precipicio. Inconscientemente estoy retrasando el fatídico momento. En vez de preparar un rápido plato de pasta, descongelar el potaje de garbanzos de la semana pasada o tirar del asiático recién estrenado de debajo de casa, decido preparar un delicioso asado con patatitas y puré de manzana para acompañar. A las 5 de la tarde empiezo a comer. ¿Quién va a moverse con semejante piedra en el estómago? Necesito reposar y digerir. Retrasamos de nuevo la función.

Tras una siesta en el sofá, vuelvo a abrir el ojo a las 8 de la tarde. Tírate por el puente joder, me dice una voz interior. Con los ánimos algo bajos, decido por fín salir al exterior a correr de una puta vez. La sesión empieza a las 8 y media.

¡Qué frío carajo! Noto como se forman estalactitas en mis fosas nasales que cortan mi respiración. Me acompaña una arrítmica hiperventilación producto de los excesos de los últimos días; birras, copas y cigarrillos a gogó. Tras unos 25' aprox, un amago de flato me invade acompañado de unas arcadas que me recuerdan que quizá mi digestión quedó parada a los 33' de ingerir alimento. Me detengo ante la mirada de los pocos y valientes transeúntes y cabeceo boca abajo, por si el asado desea salir al exterior. Cualquier diría que vengo de botellón.

Vuelvo a iniciar la marcha algo más tranquila y sosegada. Al llegar a casa estiro bien y me doy cuenta por primera vez que mis piernas no se han quejado en ningún momento, pero sí mi pecho, mi estómago, mi cabeza...

Función terminada, aplausos en la sala, felicitaciones y una buena ducha de 33’. Hasta el próximo show.

10 comentarios:

Gregorio Toribio Álvarez dijo...

Cuando lleva uno tiempo sin correr entra el mono y se desespera uno. Te ha pasado algo parecido a lo que a mí el viernes pasado. Mira que somos chalados: coger los días más fríos para volver a las andadas.

Pero que el show must go on for ever.

Take care, my friend

Elena dijo...

Que se repiiiita, que se repiiiita!!! ;P

Grimo runner dijo...

Enhorabuena por sacar a correr al asado, no era tarea fácil, te merecías la ducha e incluso una cervecita fría. El próximo día más, no te preocupes. Un beso.

Jose Sen-Sey dijo...

Me alegro Carmen. Molestias Cero = Aranjuez. Objetivo Conseguido. Divertida la cronica. El domingo nos vemos.

Mondo Gitane dijo...

.. y 33 son las lesiones que anticipo antes de que cumpla Vd. tan joseantoniana edad. Cuánta irresponsabilidad. Y además, coge y lo cuenta.
Si yo me levantara a las 12 de la mañana, me trincara un paquete de Ducados al día y echara las tripas en pleno entreno, me cuidaría muy mucho de jactarme de ello, y menos de preocupar a estas personas que la visitan (bueno, a la Correora no se la ve muy preocupada) y que seguro que tienen problemas más serios (alopecia galopante, celulitis de sus esposas, bajar un minuto en la Sansil) con los que devanarse la quijotera.
Mire, Vd. debe ir a un par de especialistas, uno en podología y otro en adicciones terminales, y montar otro show. Novedoso y saludable, que por aquí no vamos bien.

Elena dijo...

No. Con las carreras me pasa como con el paro. Muere alguien y digo "mira, un puesto de trabajo vacante...". Y en las lesiones y los competidores en carreras, pues eso...

Anónimo dijo...

En el próximo show... ¡crucifixión! (de todas tus lesiones y de tu miedo escénico, se entiende!) ;-)

Tío Dimas dijo...

Mi sobrino Sandro protagonisó en sierta ocasión un show bisnes con un númbero de la gardia sevil que consistió en levantar un par de kilitos de un alijo del medillin ese y menudearlo por el uskal hirria. Aluego se apuntaron a una carrera popular de la AVT y se braseaban mutuamente, de lo altos de colombiana que iban.

torcas dijo...

Quien pillara tus 33 (me estoy refiriendo a los años...). ¡Pues no te quedan carreras, estrenos y re-estrenos! (y yo que lo vea). Enhorabuena por la vuelta y animo, que no decaiga la fiesta.

BSS

Jose

Anónimo dijo...

Ya has visto que no hay mal que dure "treintaitres" años...pensabas que te quedarias coja eh???pues en la de Aranjuez tienes que aguantar por lo menos una "horita".Besos guapa.